sábado, 29 de mayo de 2010

Dia 216. Un mercado flotante en el Mekong

Desde Rach Gia, una furgoneta nos llevo hasta Can Tho, localidad situada en las vecindades del delta del Mekong.

Con nacimiento en la cordillera del Himalaya, uno de los rios mas grandes del mundo: el Mekong, reparte vida a lo largo de su trayecto por: China, Birmania, Laos, Tailandia, Camboya y Vietnam, siendo este ultimo en el que se encuentra su desembocadura al mar.

Miles de personas viven gracias a la riqueza de sus aguas y el delta no iba a ser menos, y esque ademas de tratarse de un lugar con gran diversidad de fauna y flora, los locales utilizan sus aguas para comerciar, dando lugar al famoso mercado flotante del Mekong.

Con las primeras luces del dia embarcamos en un pequegno barquito al cual le habian adosado un motor con helices, debiamos llegar cuanto antes, ya que a partir de las 9 de la magnana cesa la actividad.


Todavia no habiamos llegado al mercado en cuestion, pero por el camino la gente empezaba a ofertar sus productos. Es gracioso ver a los vendedores acercarse a tu barca para intentar endosarte cualquier cosa, pero nosotros que teniamos prisa seguiamos el camino con nuestro peculiar medio de transporte sin darles opcion a que nos echaran el anzuelo.

Llegamos al primero de los mercados: sandias, melones, mangos, platanos, verduras...todo volaba por los aires pasando de una barca a otra, el mercado estaba en pleno apogeo!
La conductora de nuestra barca se servia de los remos para esquivar al resto de barcos con los que nos cruzabamos, mientras nosotros girabamos constantemente la cabeza, observando con todo detalle el espectaculo, como si se tratase de un partido de tenis.

Hicimos una pequegna parada en el camino para ver como fabricaban los noodles de arroz en una casa, un extragno proceso en el que de una cacerola sacaban una especie de masa que secaban y luego cortaban en tiras.
Ademas tuve la oportunidad de conocer una nueva modalidad de bagno: subido a las ramas de un arbol con salida directa al rio...esa energia que se ahorra uno al no tener que tirar de la cadena...

De camino al segundo mercado descubririamos al animal mas extragno jamas visto: el pez mutante. Solo le faltaba el tercer ojo, como en "los simpson".
Se trataban en cuestion de una especie de peces con patas, que iban saliendo del rio hacia la orilla dando saltitos!! Por que tenian patas?? Ni idea! Y para el que piense que se podria tratar de un renacuajo, puede ir desechando la idea, porque no, eran peces mutantes con patas!!

Uno comprende la existencia de estos animalillos cuando visita estas aguas y la suciedad que las acompagna. Es alucinante la cantidad de basura que hay, y cuando digo basura es: bolsas y bolsas de basura, porque no, aqui no hay camiones ni barcos que pasen cada noche a por los desperdicios de la gente, simplemente utilizan el metodo mas rapido y sencillo: hacerle un nudo a la bolsa y tirarla al rio! Y todavia resulta mas alarmante cuando tenemos en cuenta que toda esta gente que vive en sus orillas utiliza ese agua para: cocinar, beber y bagnarse en ella!
El perfecto caldo de cultivo para todo tipo de enfermedades...



Al igual que en otras ocasiones, nignos y mayores saldrian a nuestro encuentro saludandonos con una sonrisa.
Los nignos de los colegios, vestidos con sus uniformes se llamaban unos a otros y entre nerviosas risas nos gritaban: Hellooooo!!! Hellooooo!!, saludo que les devolviamos provocando un estallido de carcajadas.
Vietnam esta lleno de nignos con uniformes, y esque la educacion es obligatoria en todo el pais.


Llegamos al segundo mercado donde ya empezaban a recoger. A pesar de que la mitad de la gente dormia placidamente mecidos en sus hamacas, conseguimos comprar varias frutas extragnas, entre las conocidas una rica sandia!



Era hora de regresar, pero en lugar de volver por el mismo camino, la segnora nos llevo por uno de los reconditos canales, en los que llegados a un punto teniamos que ir separando con las manos las hojas de palmera para poder avanzar.
Tambien era aqui el punto mas sucio, y en cada tramo, el improvisado motor se paraba debido a que la basura se enredaba en las helices.




Otra parada en el camino, casualmente en un restaurante...
Justo en el riachuelo de al lado pescaban las serpientes que luego cocinarian para los clientes.




Continuamos Mekong abajo cuando empezamos a ver a gente en el agua con la ropa puesta, tras valorar decenas de hipotesis distintas, descubririamos que es asi como se bagna la gente en el sudeste asiatico: vestidos! No parece mal metodo: lavas la ropa al mismo tiempo!! Aunque tratandose del Mekong...quizas salga mas sucia...



Y entre palmera y palmera regresamos a Can Tho con el tiempo justo para coger otra furgoneta hacia la caotica Ho Chi Minh.

viernes, 28 de mayo de 2010

Dia 215. Mas o menos en la Cochinchina...

48 horas de autobus con sopas de noodles de por medio, nos llevaron hasta Ho Chi Minh, la antigua Saigon o tambien conocida como Cochinchina.

Ciudad abrumadora donde las haya, tan solo estuvimos de pasada, ya que cogimos directamente una furgoneta que nos llevo hasta Rach Gia, localidad costera desde la cual embarcariamos a Phu Quoc, una isla situada en el golfo de Siam, justo enfrente de Camboya.
Para hacer todo este tipo de transportes "estacion de autobuses-puerto", nos serviriamos de moto-taxis en las cuales nos intentabamos acomodar como buenamente podiamos con las mochilas grandes puestas y todo. En mas de una ocasion casi me vence el peso del mochilon!



No solo turistas se dirigian a Phu Quoc. Los lugaregnos empleados en la isla viajaban en el mismo barco, con la unica diferencia de que mientras nosotros pagamos una pasta, ellos simplemente pagaron un precio simbolico...



Y por fin pusimos un pie en la arena! Verde, verde, verde rodeado de hermosas playas, asi es como puedo resumir mi primera impresion. La mayor parte de la isla es considerada parque nacional, constituido por una frondosa selva.



En la furgoneta que nos acercaria a los hostales conocimos a Miguel y Ernesto, que a pesar de vivir en Formentera, decidieron pasarse por la isla para saludar al tan agnorado mar.
Tras mucho buscar, nos decidimos por un super hotel con playa privada y piscina, pero no penseis que nos hemos vuelto unos pijos, la razon esque era el mas barato, pagariamos menos de 10 euros por estar en este pedazo de resort!

Raquel irradiaba alegria, no es solo que hubieramos dejado atras el oscuro cielo que nos llevaba acompagnando casi 2 semanas, esque habiamos cambiado los hostales cochambrosos por ese palacio! Inmediatamente fuimos a la playa para disfrutar de ese momento de felicidad.





El plan para el dia siguiente era alquilar unas motos y dar una vuelta por la isla, pero Miguel y Ernesto, que conocian bien el negocio del alquiler de motos, puesto que se dedicaban a ello en Formentera, nos aconsejaron que si no habiamos cogido una moto en nuestra vida, no lo hicieramos alli, ya que las carreteras consistian en caminos de tierra y arena.
Muy amablemente se ofrecieron a llevarnos a Raquel y a mi, Kimmo tuvo que buscarse la vida y aprender en una breve leccion como conducir la moto, jajajaja.



Nuestra primera parada fue en unos campos de pimienta, especia que se cultiva en la isla de forma activa. Junto al campo la tumba de un ancestro miraba hacia los trabajadores, que bajo el sol iban recolectando los pequegnos granitos, con un simple sombrero como resguardo.

Alli, Raquel decidio aprender a conducir la moto, menos mal que Ernesto hizo de profesor y no hubo ningun tipo de lesion!



Visitamos un pequegno pueblo costero, tambien uno de los puertos, nos dimos un chapuzon en las cristalinas aguas de una playa desierta y recorrimos kilometros y kilometros de caminos de tierra que iban tintando poco a poco: nuestras pieles, dientes e incluso lagrimas!



Por fin llego la hora de hacer un pequegno descanso, como no, para comer el unico plato que servian en aquel aislado restaurante: sopa de noodles!!



Raquel y Kimmo se encargaron del postre: un segnor que iba en moto con una musiquita vendia helados, "mmmmm" dijo Raquel, y salio disparada hacia el, volviendo con la mano repleta de helados caseros, es decir: una sustancia congelada alrededor de un palito de helado reutilizado y envuelto en una bolsa de helado reutilizada...gracias por ese manjar Raquel !



Los nignos en uniforme salian de los colegios saludandonos continuamente: Hello!!! Hellooooo!!! Y esque eramos la atraccion del lugar. Los nignos corrian y gritaban a nuestro paso, aguardando euforicos una respuesta por nuestra parte, respuesta que ofreciamos indudablemente, recibiendo a cambio el mejor regalo que uno podria esperar: sonrisas y carcajadas de alegria.
Entre todos estos nignos descubririamos a una pequegna vietnamita completamente rubia y con los ojos azules! Caprichos de la madre naturaleza!



De regreso al hotel tuvimos que atravesar toda la isla, no mucho teniendo en cuenta los kilometros de esta, pero eterno, si evaluabamos el estado de las pistas...Para colmo, una de ellas se habia derrumbado y habian hecho un camino paralelo, por mitad de la selva!

Habia momentos en los que creia que participabamos en una competicion de motocross!!



Puentes construidos por palos, cuestas de resbaladiza arena, conductores cargadisimos a los cuales tuvimos que ayudar empujando...En esos momentos todo eran palabras de agradecimiento hacia Ernesto y Miguel por haberse ofrecido a llevarnos y no tener que conducir una de esas motos.

Respecto a Kimmo, supero la prueba con sobresaliente!



Tras aquel intenso dia de motocicleta mi imagen era similar a la de un conguito...y no, no era especialmente por accion del sol...





Nos despedimos de Ernesto y Miguel prometiendoles visitar Formentera (lo hare!!!) y embarcamos de regreso a Rach Gia...

domingo, 23 de mayo de 2010

Dia 211. Vietnam

He aqui una pequegna ayuda para el que no ande muy bien orientado...




Atravesamos el paso de la amistad entrando a Vietnam por una frontera singular donde las haya. No solo por situarse en mitad de un parque Nacional, sino por la "informalidad" con la que te dejan atravesarla. En nuestro caso, fue un chico en practicas quien tras media hora tramitando la entrada de un solo turista, nos dejo entrar en el pais.
De ahi, nos cruzariamos con un grupo de chinos, que al igual que nosotros buscaban un medio de transporte, ellos iban a Hanoi, nosotros todavia no teniamos destino, asi que paramos a un autobus que nos llevo a todos a la capital, solo habia un problema...no teniamos Dong (la moneda del pais)!! Ni siquiera dolares, tan solo llevabamos euros, simples papeles de colores a los ojos del conductor...Menos mal que una de las chinas nos cambio dinero, pero de ahi en adelante aprenderia una grandisima leccion: siempre hay que llevar dolares encima, verdad Tango? :)

Hanoi nos dio la bienvenida, una desbaratada ciudad en la que las motos sembraban el caos. Kimmo y Raquel se decidieron a ir a la estacion de autobuses a comprar los billetes para el dia siguiente, evidentemente se sirvieron de una moto para ir hasta alli, literalmente UNA moto, donde se acomodaban: Kimmo, Raquel y el conductor...y a ojos de los vietnamitas, todavia habia espacio para dos o tres personas mas, lo corroboraban el resto de motos que llegaban a transportar familias enteras, con abuela y todo.
En el sudeste asiatico la moto es el medio de transporte familiar, cientos y cientos de motos se entrecruzan en las calles sin atender a normas de trafico. Algo logico, teniendo en cuenta que siendo tantos habitantes, no podria abarcar de otra manera igual numero de coches. Aun asi, la contaminacion hace acto de presencia en la ciudad, algo que nos impulso a huir en busca de naturaleza hacia la isla de Cat Ba.

Cuando al dia siguiente nos dirigiamos a la estacion de autobuses, aprovechamos para cruzar por un mercado callejero que ofertaba: frutas, verduras, flores, pescado, y carne fresca...



Cogimos un autobus a Hai Phong, que no nos defraudo con la mitica sesion de karaoke... 20 despechos, 13 noviazgos y 8 matrimonios despues llegamos a la ciudad, donde tendriamos que buscar el barco que nos llevara a la isla.
Como era de esperar fuimos directos al puerto, de donde en escasos minutos partia el ultimo barco del dia. Me ahorrare comentarios sobre la horrible experiencia de "salida del autobus y llegada hasta el puerto", donde los conductores de tuk tuk y motos que acudieron a nuestro encuentro en masa, no tenian suficiente con gritarnos en el oido, sino que terminaron zarandeandonos del brazo (aqui comenze a desarrollar mi "tuktuk-fobia"). La segnorita de la agencia que vendia los billetes nos informo del precio: cerca de 40 euros. Queeeeeeeeeeee!!!??? Evidentemente le dijimos a la simpatica muchacha que se podia meter los billetes por el mismisimo oooooooortoooooo!!!
Dos holandeses bajaron del autobus que te acercaba al barco y nos informaron de que en internet esos billetes costaban 10 euros, pero que en esos momentos la pagina daba errores y no los pudieron comprar, ademas los vietnamitas que hacian el mismo recorrido habian pagado alli mismo el equivalente a unos 10 euros...
Se lo explicamos a la segnorita, quien nos dio nuestra merecida explicacion: Si, si, teneis razon, esque vosotros sois extranjeros...
El colmo de los colmos, vale que te quieran racanear unos eurillos, hasta ahi nuestra "permisividad" por venir de un pais mas favorecido, pero hasta esos extremos!!!
Decididimos unirnos para darle un ultimatum a la vendedora, quien nos lo dijo asi de claro: mi ultimo precio son 25 euros, es agno nuevo y no salen mas barcos, vosotros vereis.
Y daaaaale, con el agno nuevo, ya no me acordaba de que en Vietnam es a la vez que en China!!
A pesar de mi indignacion, tuvimos que comprar esos billetes...

Ni siquiera obtuvimos los asientos mas privilegiados, que se lo pregunten al pobre Kimmo que tuvo que viajar en una banqueta de plastico que le llegaba a los tobillos. Pero al menos horas despues llegabamos a la isla de Cat Ba.

Cat Ba es el punto perfecto desde el cual visitar la Bahia de Halong. Aproximadamente la mitad de la isla es parque Nacional, por lo que ademas de tratarse de un medio mas barato de visitar la Bahia, te permite disfrutar de un paisaje sin igual.

Al dia siguiente nos dirigimos en un tour hacia la famosisima Bahia de Halong, escenario de peliculas como "Piratas del Caribe" y que al igual que la isla de Cat Ba goza del titulo de "Patrimonio de la Humanidad". Un barco seria nuestro medio de transporte durante un dia completo.


Nuestra primera parada seria en unas cuevas erosionadas gracias a la accion del mar. El suelo lo conformaban millones de pequegnas conchas que se resquebrajaban a nuestro paso.




Hacia un frio de narices, para que negarlo, pero a pesar de ello merecio la pena la visita a aquella espectacular bahia: verdes montagnas brotaban del mar por todas partes, barcos pesqueros (y turisticos) surcaban sus aguas entre casitas flotantes, mientras pescadores y habitantes del lugar se hacian su vida sobre el agua, como buenamente podian, grandes pajaros surcaban los cielos, mientras algun que otro se aventuraba en la caza de un pececillo.




El mejor momento llego cuando nos hiceron entrega de unos pequegnos Kayak y nos dieron plena libertad para movernos por el mar.
Kimmo navegaba con un chico aleman, y mi compagnera era Raquel. Los que viajabamos previamente en el barco nos adentramos con nuestros respectivos kayak en una pequegna cueva, pero todos excepto nosotros dieron media vuelta, y esque contabamos con unas pequegnas linternas que nos permitieron adentrarnos en sus profundidades.
A pesar de los timidos: "Ejem, ejem, y si volvemos yaaaaaaaa???" De mi pequegna grumete, persistimos en la busqueda de una nueva salida...aunque tampoco desechabamos la idea de dar con un tesoro!



Y el que la sigue...la consigue! momentos despues llegabamos...


Al paraiso!!
Un lago rodeado de montagnas nos dio la bienvenida...pajaros, peces, naturaleza...el silencio...y nada mas...nuestra merecida recompensa!



Fuimos los primeros en salir y los ultimos en llegar al barco, los otros turistas nos miraban con cara de "donde os habiais metidooooo", pero no les desvelamos que habiamos descubierto nuestro gran tesoro particular.


Para finalizar el dia solo faltaba la visita a "Monkey island", como?? Que no vamos a ir? Le ensegnamos y reensegnamos nuestra factura al capitan: hombre si vamos!! Si hace falta conduzco yo!!
Y esque le habiamos dejado bien claro al chico que nos vendio el tour que queriamos visitar esa isla, de hecho, se lo hicimos escribir en la factura por si las moscas!!

No pudo negarse!


Y siii!, los vimos!


Al dia siguiente dejamos el mar, para adentrarnos en la selva de Cat Ba.



Mariposas gigantescas, arboles interminables, lagos oleosos, ruidos de todo tipo de animales y hasta una pequegna serpiente, nos acompagnaron durante nuestro trekking a traves de aquella exuberante naturaleza.




Largas horas caminando, tropezones, escalada, equilibrios sobre troncos que hacian las veces de puente, pero al final...


Lo logramos!!


Llegamos a nuestro barco sanos y salvos!!!

O eso creiamos...


Navegamos en aquel inestable y diminuto cascaron durante horas, pero eso nos permitio visitar de cerca los pueblos flotantes de los alrededores.



No hay pelicula que la deje a la altura, para admirar este grandisimo lugar, hay que venir en persona a surcar sus aguas y dejarse embargar por este mundo de piratas, montagnas y naturaleza.

Horas despues regresabamos de nuevo a Hanoi.


Pero no seria por mucho tiempo, tras unas horas de visita por la ciudad, comprobar que el tiempo seguia siendo un asco, y haber sufrido una revelacion, en la que un segnor empezo a cantar en la calle"Ho Chi Miiiiiiinh, Hooooo Chiiiii Miiiiinh", decidimos emprender rumbo a Ho Chi Minh, la antigua Saigon.





Bar ambulante


Solo teniamos 48 horas de autobus por delante...